La diferencia entre inflamación sistémica y sentirse hinchado: lo que necesitas saber

En el mundo de la salud y la nutrición, hay dos términos que suelen confundirse: la inflamación sistémica y el hecho de sentirse hinchado o experimentar retención de líquidos. Aunque pueden parecer similares, son procesos completamente distintos. Vamos a aclarar estas diferencias para que puedas entender mejor tu cuerpo y tomar decisiones más informadas.

¿Qué es la inflamación sistémica?

La inflamación sistémica es una respuesta del sistema inmunológico a un estímulo que el cuerpo percibe como una amenaza. Puede ser provocada por infecciones, lesiones, enfermedades crónicas como la diabetes o incluso por malos hábitos alimenticios y de estilo de vida y/o el sedentarismo.

Esta inflamación es un proceso silencioso que afecta todo el cuerpo y puede llevar a problemas de salud a largo plazo, como enfermedades cardiovasculares, resistencia a la insulina e incluso ciertos tipos de cáncer. Los síntomas no siempre son evidentes, pero pueden incluir:

  • Cansancio crónico.
  • Dolor articular.
  • Problemas digestivos recurrentes.

Pero, antes de alarmarte, déjanos decirte que para ver realmente si hay inflamación sistémica debes hacerte análisis, no lo puedes ver en el espejo. Recuerda la importancia de hacerte analíticas de vez en cuando para ver que todo va bien.

¿Qué significa sentirse hinchado?

La hinchazón es una sensación temporal de pesadez o llenura en el abdomen, generalmente causada por gases o una digestión lenta. Puede aparecer después de comer en exceso, consumir alimentos que te generan gases, intolerancias a alimentos, ... 

A diferencia de la inflamación sistémica, la hinchazón no es un problema grave y suele resolverse rápidamente con cambios en la dieta, mejorando la masticación, en definitiva mejorar tus hábitos de vida, al igual que la inflamación sistémica también va a mejorar cuando cambiemos nuestros hábitos y llevemos una vida saludable y activa. 

Causas comunes de la hinchazón:

  • Comer demasiado rápido.
  • Intolerancia a algún alimento, recuerda que puedes desarrollar nuevas intolerancias a lo largo de tu vida.
  • Consumo excesivo de bebidas carbonatadas.
  • Alcohol, falta de sueño,...

¿Y la retención de líquidos?

La retención de líquidos ocurre cuando el cuerpo acumula agua en los tejidos, causando hinchazón en áreas como el abdomen, las manos, los pies o los tobillos. Esto puede deberse a:

  • Cambios hormonales (por ejemplo, durante el ciclo menstrual).
  • Consumo elevado de sal.
  • Permanecer sentado o de pie durante largos períodos.
  • Estrés crónico

¿Por qué es importante conocer la diferencia?

Confundir estos conceptos puede llevar a interpretar mal las señales de tu cuerpo. Por ejemplo, alguien que confunde hinchazón con inflamación podría preocuparse innecesariamente o aplicar soluciones equivocadas, como restringir alimentos que realmente no son perjudiciales. Por todo esto, es importante que cuentes con alguien que sepa ayudarte tanto a cambiar tus hábitos y mejorar tu vida como con tu médico. 

Conclusión

Entender la diferencia entre inflamación, hinchazón y retención de líquidos te permite cuidar mejor de tu salud y evitar soluciones innecesarias. Recuerda que cada señal de tu cuerpo tiene un significado, y aprender a interpretarlas es clave para tu bienestar.

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